Por Dannah Gresh
Tal vez recuerdas algún momento en que escuchaste una canción triste después de un ruptura una y otra vez una. ¡Probablemente no te hizo sentir menos triste!
¿Pueden las letras de las canciones crear ansiedad y depresión en nuestras hijas? La respuesta corta es “sí.” Aquí hay tres cosas que debes saber.
- La depresión y la ansiedad están en aumento en preadolescentes y adolescentes.
El número de jóvenes con trastornos mentales se ha más que duplicado en un período de 10 años. Muchos de los factores que contribuyen a los episodios de depresión que los preadolescentes y adolescentes presentan, incluyendo híperconectividad debido a las redes sociales, la sobre estimulación de medios de comunicación, insomnio y la falta de vida en comunidad debido a horarios escolares saturados. Si tu hija está batallando con esto, considera los factores de riesgo y habla con ella sobre el tema. ¿Pero, podría la música ser otro contribuyente?
- Las letras de canciones resaltan cada vez más el enojo y la tristeza
Se utilizó análisis cuantitativo para estudiar el cambio en la música pop de la década de 1950 a 2016. Los resultados revelan que “la expresión del enojo y la tristeza en las letras ha aumentado gradualmente con el tiempo, mientras que la expresión de la alegría ha disminuido”. Algunas de las letras de las canciones más populares de hoy son violentas, agresivas e irrespetuosas hacia las mujeres.
Añade a eso el hecho de que la música es importante para los preadolescentes y adolescentes. Siempre lo ha sido. (Probablemente pasaste largos ratos con tus audífonos cuando eras más joven). El joven promedio escucha aproximadamente 2.5 horas de música al día. Aquellos que están creciendo en zonas de alto riesgo pueden estar conectados a sus audifonos hasta cuarenta horas a la semana. ¿Será que estas letras enojadas, tristes y agresivas están afectando su estado de ánimo?
- Las letras de canciones pueden incitar a la ansiedad, agresividad, y pensamientos depresivos.
Durante cinco experimentos con 75 mujeres y 70 varones estudiantes universitarios, los que escuchaban canciones violentas eran más hostiles que aquellos que escuchaban canciones no violentas del mismo artista y del mismo estilo musical.
La conclusión es que la música impacta nuestras emociones. Quizás es por eso que nos gusta tanto. Y considera esto: tu hija está en pleno desarrollo de sus emociones. Usar una canción pop cómo manera de procesarlas no es del todo malo si la canción no contiene letras oscuras, explícitas u obscenas. La música también puede hacernos sentir esperanzados, felices y con ganas de avanzar.
Recientemente vimos la necesidad de música positiva y alentadora para preadolescentes y adolescentes. Entonces nos asociamos con una canta-autora con sede en Nashville, Texas para producir la primera colección de nuestras propias canciones de Chica Verdadera, incluidas canciones de adoración y pop que fomentan la verdad sobre temas que preocupan a las niñas como amistades, chicos y más. Llena de canciones cuidadosamente pensadas y basadas en versículos bíblicos importantes para la visión del mundo en el desarrollo de tu hija, creemos que es una lista de reproducción esencial y que la inspirará a adorar a Dios y tener confianza en quién es ella como hija de Cristo.
La música por sí sola no creará depresión y ansiedad en tu hija, pero si está luchando con emociones inestables podría empeorar las cosas. Podría ser una invitación a concentrarse en lo que no debería. Por el contrario, ¡escuchar letras positivas y canciones felices podría ser lo adecuado para guiarla en la dirección correcta!
Gracias muy útil y ojala podamos conseguir la música que están haciendo. Dios les bendice.