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Por: Lisa Rowell 

¡Ay! 

Las palabras pueden lastimar. Tu hija no necesita ir muy lejos para encontrar ejemplos de palabras crueles y desalentadoras. Nuestro mundo parece florecer en medio de palabras malas e hirientes que se dicen unos a otros, y ella no va a escapar del poderoso dolor de las palabras.  

Pero hay buenas noticias: 

Tus palabras amables y edificantes tienen más poder que las mentiras de sus compañeros o del mundo. 

Aparta tiempo esta semana para usar tus palabras y ganar la batalla librada en contra de su corazón. Las palabras que le dices afectan la manera en que ella se ve a sí misma, ve a Dios y ve su relación contigo y con los demás. Tus palabras le importan a ella…  y también le importan a Dios. 

En Proverbios, Dios nos dice que las palabras pueden ser dulces al alma (16:24) y pueden dar vida (18:21). Incluso se compara a las palabras sabias con una buena comida (18:20) y con aguas profundas (18:4), y a las palabras suaves, con un árbol de vida (15:4).

¡Sí! Dios se preocupa por tus palabras y por cómo las usas. ¡Asegúrate de usarlas sabiamente mientras formas a esa dulce niña!

Para plantar semillas de amabilidad en la lengua de tu hija, tienes que dar el ejemplo ¡usando tú misma palabras amables! Así que, para animarte a empezar, aquí hay catorce frases poderosas que deberías decirle a tu hija casi todos los días:

  • Te amo.
  • Algo que me encanta de ti hoy es…
  • Me encanta que seas parte de nuestra familia porque…
  • Tú haces la diferencia.
  • Confío en que tú puedes manejar esto.
  • ¿Qué opinas? Tu opinión me importa.
  • ¿Qué quisieras hacer diferente la próxima ves? 
  • Gracias por disculparte. Te perdono.
  • Lo siento. ¿Me perdonas?
  • Creo en ti. 
  • Te escucho.
  • Eres una gran ayuda.
  • Me gusta pasar tiempo contigo.
  • Mi vida es mejor porque Dios te puso en ella. 

¡Aaah! ¿No se sintió bien leer estas palabras? ¡Imagina cómo se sentirán cuando tu hija las escuche venir de tus labios! 

Enseñarle a tu hija a decir palabras amables ¡no se detiene aquí! ¡Este solo es el primer paso!


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